viernes, 24 de enero de 2014

Divergente - Veronica Roth


Título original: Divergent
Saga: Divergente

Autora: Veronica Roth

Número de páginas: 464 páginas

Año: 2011

Sinopsis: En el Chicago distópico de Beatrice Prior, la sociedad está dividida en cinco facciones, cada una de ellas dedicada a cultivar una virtud concreta: Verdad (los sinceros), Abnegación (losaltruistas), Osadía (los valientes), Cordialidad (los pacíficos) y Erudición (los inteligentes). En una ceremonia anual, todos los chicos de dieciseis años deben decidir a qué facción dedicarán el resto de sus vidas. Beatrice tiene que elegir entre quedarse con su familia o ser quien realmente es, no puede tener ambas cosas. así que toma una decisión que sorprenderá a todo el mundo, incluida ella.Durante el competitivo proceso de iniciación posterior, Beatrice decide pasar a llamarse Tris e intenta averiguar quiénes son sus verdaderos amigos, y dónde encaja en su vida enamorarse de un chico que unas veces resulta fascinante y otras la exaspera. Sin embargo, Tris también tiene un secreto, algo que no ha contado a nadie para no poner su vida en peligro. Cuando descubre un conflicto que amenaza con desbaratar la, en apariencia, perfecta sociedad en la que vive, también averigua que su secreto podría ser la clave para salvar a los que ama o… para acabar muerta.

Opinión:  Es un libro que bastante similitud a los que se leen hoy en día entre gente joven, este también al igual que Los Juegos del Hambre, Enclave, La selección, etc. es una historia distópica. 

Como pone en el resumen del libro, en el libro de Veronica Roth, la sociedad esta dividida en cinco facciones, verdad, abnegación, osadía, erudición y cordialidad. Siguiendo desde hay el libro coje una personalidad propia,  y pierde esa similitud que tiene con los demás libros.

Es un libro que engancha mucho y además te hace meterte mucho en la historia, y eso es algo que ami realmente me fascina.

Una de las cosas que más me han gustado han sido los personajes.
Empecemos por Tris o Beatrice, la protagonista. Es ua joven de 16 años que nace en la facción de abnegación. En este libro ella decide ser osada, y se cambia de facción, pero eso no significa que lo sea, ella es divergente. Ella es o quiere parecer valiente, y por lo tanto hace actos para demostrarlo.
Luego tenemos a Cuatro o a Tobias, mi personaje favorito. Es uno de los entrenadores de osadía, y el entrenador de Tris también. Es un chico misterioso, que a mi me ha encantado, de verdad, es un chico muy especial la verdad…
En resumen, os animo a que leais el libro, y lo recomiendo al 100%. Es muy buen libro, que además el final te deja con ganas de más.

Descargar o leer libro: Opción 1 Opción 2

miércoles, 22 de enero de 2014

Humor de Tributos

Llevo unas cuantas semanas recopilando estas fotos, y ¡por fin tengo unas cuantas para hacer esta entrada! Espero que os gusten mucho.
P.d. Estoy en exámenes y no tengo apenas nada de tiempo; espero poder subir el siguiente capítulo durante esta semana.

Un beso :)

















lunes, 13 de enero de 2014

Tras sinsajo - Capítulo 14

Me acerco hacia el y le acaricio la barbilla con suavidad; poco a poco me acerco hasta sus labios hasta rozarlos y le soy un corto beso, y luego uno más largo.
-Yo también te amo Peeta. -hago una pequeña pausa y sigo- Te amo como nunca lo he hecho y como nunca lo haré.
Peeta me mira con ojos desconcertantes.
-¿Es eso... -suspira y sigue- ...Real o no real?
Al escuchar sus palabras mil y un recuerdos atraviesan  mi mente, como su fuese una rápida película veo diferentes imágenes de los últimos años en mi cabeza. Y todos, o la mayoría de ellos son buenos, son recuerdos que me provocan una sonrisa.
-Real.
El responde con una sonrisa, al principio un poco vergonzosa, pero luego expresa felicidad.
-Gracias Katniss...
-¿Gracias? ¿Porqué? -sonrío mientras suelto una leve carcajada.
-No hay ningún porque, solo es por todo esto. -se levanta y se va salón, mientras me deja con una pequeña sonrisa.
Me quedo en el salón durante un tiempo, sin moverme y mirando a la nada, hasta que alguien llama a la puerta. Pero para cuando llego Peeta ya la ha abierto.
-Si claro, aquí esta.- dice Peeta al que esta fuera de casa. Al escucharme gira la cabeza y me mira sonriendo- Gale y Katniss han venido a buscaros a Prim y a ti.
-Ah si, se me había pasado y no estoy lista, lo siento... Si no te importa esperar un poco...
-No claro, esperaremos aquí. -responde sonriente, y mira a Peeta.- El nos hará compañía.
Peeta le responde con una sonrisa.
Subo corriendo a la habitación y abro el armario.
No tengo mucha ropa, así que decido coger algo simple; me pongo unos baqueros oscuros que me llegan justo a los tobillos, con una camiseta gris, unas cómodas botas de cuero negras, y un jersey negro por encima.
Decido recogerme el pelo en una larga trenza, al igual me la recogía hace tiempo, mucho tiempo mi madre. Pero hace años que me las apaño para hacérmela yo.
Me miro al espejo, y por un momento no veo a la Katniss de ahora, a la mujer en la que me he convertido. Veo a la Katniss de antes. Y esto me hace sentir a mi familia más cerca, a mi padre, a mi madre... A Prim.
Siento que un escalofrío me recorre el cuerpo, y antes de empezar a llorar de nuevo decido bajar al salón.
Respira hondo Katniss, y sonríe. 
Al bajar veo a Peeta y Gale sentados en un cómodo sofá, hablando como si fuesen amigos de toda la vida, y bueno, eso me hace alegrarme.
-¡Hola chicos! -los saludo como si nada, y los dos me saludan con la mano.- Ahora mismo llamo a Prim...
-Mamá estoy aquí. -me responde con una sonrisa.
-Entonces vamos. -dice Gale- ¿Peeta tu también vienes no?
Peeta me mira desconcertado, y le hago un gesto con la cabeza para que venga, pero el niega con la cabeza.
Sabe que Gale y yo queremos hablar sobre nosotros, y el no lo conoce como yo...
-¿Seguro? -insiste Gale.
-Si, seguro. Pasarlo bien.- se me acerca y me da un beso en los labios, y a Prim otro en la mejilla.- Adiós.


lunes, 6 de enero de 2014

Tras sinsajo - Capítulo 13

-Maldito Haymitch... -gruño cuando me cierra la puerta en la cara.
Tengo una extraña sensación, que hace mucho no la tenía, siento que a mi alrededor algo gordo está pasando… Pero no saber el que me mata.
Al llegar a casa decido no pensar más en eso, aunque me cuesta quitármelo de la cabeza.
Decido limpiar toda la caza de la mañana y limpio las frutas con mucha atención.
Me cuesta olvidarme del todo pero intento mantenerme ocupada, por lo menos hasta que llegue Peeta.
Al cabo de una hora llegan Prim y Gale a casa; me saludan sonrientes y Gale me da un beso en la mejilla.
-¿Qué tal en la escuela? -les pregunto mientras sigo limpiando las fresas.
-Bien, hoy hemos tenido educación física -Prim sonríe de lado a lado.
-Me alegro -sonrío de lado a lado, y entonces me acuerdo- Oye Prim ¿Quieres conocer a alguien?
Al escuchar la pregunta asiente con la cabeza y sonríe.
-Pronto llegarán, así que estate lista cariño.
Ella sube corriendo las escaleras hasta la segunda planta, donde están las habitaciones. En ese momento alguien llama a la puerta y es Peeta.
-Hola cielo -me da un cálido beso en los labios- ¿Quieres que hablemos?
Al preguntarme eso Peeta me mira con compasión, sabe que lo que me tiene que decir no me va ha gustar, pero aun así sigue con su dulce sonrisa. Me coje de la mano y me lleva al salón, y los dos nos sentamos en el sofa.
-Haber… No sé ni por donde empezar -me dice él, mientras se rasca la cabeza.
Siento un cosquilleo en mi estómago, pero no es un dulce cosquilleo, no es como el que siento cada vez que Peeta me dice algo, o como el que siento cada vez que me besa… No, no es así, es un cosquilleo que hace que me ponga más y más nerviosa.
-¿Te acuerdas desde los últimos Juegos?
Si, me acuerdo, y nunca podré olvidarlos.
Pasé mi vida odiando los Juegos, odiándolos a muerte, y todavía los odio, y los odiaré siempre.
Pero los últimos Juegos fueron diferentes, los septuagesimos sextos juegos no eran lo mismo. Esos juegos se hicieron porque nosotros, los vencedores, lo elegimos.
En aquel momento odiaba todo, odiaba a los de mi alrededor y me odiaba a mí, y claro, odiaba al Capitolio por quitarme lo que más quería en este mundo: a Prim. Y creyendo que esos juegos me harían sentir mejor los apoyé.
Pero claro, esos juegos no me trajeron a Prim, y de hecho me sentí peor viendo a gente morir por televisión por mi culpa.
-Si me acuerdo ¿Por? -le respondo a Peeta.
-Para los que apoyaban al Capitolio esos juegos fueron humillantes y tal y cual… Y decidieron que los últimos no podían ser esos...
-¿Qué quieres decir Peeta? -le corto nerviosa- ¿Quieren hacer otros Juegos?
-No lo sé… Sé que no quieren dejar las cosas así… Y nos odian, porque algunos de ellos han perdido lujos, y poder… Si al final se animan a hacerlo sabes que son capaces.
-¿Son muchos los que nos odian?
Sonríe un poco, y me mira directamente a los ojos.
-De momento no... Y no creo que nunca lo sean. Además nosotros somos muchísimos más. Pero nos pueden hacer daño, y el simple hecho de pensar que a alguno de vosotros tres os pueden hacer daño siento impotencia y no puedo con eso ¿Sabes? Siento haberte preocupado tanto.
-Me pasa lo mismo... Me he vuelto loca pensando que podía ser... He estado hasta en casa de Haymitch, pero no me ha contado nada.
-Así es el -sonríe un poco- Te amo Katniss.


Josh Hutcherson

Estaba navegando por internet y he encontrado estos gifs muy *_____* de Josh Hutcherson.
Me apetecía compartirlas con vosotros, así que aquí os las dejo.
Un beso :)
                         



















domingo, 5 de enero de 2014

FRASES CIUDAD DE HUESO


  • -Hola, soy uno de los gamberros con cuchillo que conociste ayer en el Pandemónium. Me temo que te causé una mala impresión y esperaba que me dieras la oportunidad de resarcirte… 
    -¡SIMON! ¡No tiene gracia! 
    -Ya lo creo que la tiene. -Clary y Simon

  • -La poesía de tu amigo es terrible. [...] Suena como si se hubiera comido un diccionario y empezado a vomitar palabras al azar.  -Jace
  • -¿y entonces qué?
    -Entonces verás el mundo como es: infinito.  -
    Clary y Jace
  • -¿Un diario sin dibujos míos en él? ¿Dónde están las tórridas fantasías? ¿Las cubiertas de novelas románticas?  -Jace
  • -Entrad. E intentad no asesinar a ninguno de mis invitados.  -Magnus Bane
  • -Pensé que podría gustarte Magnus. Es simpático, ¿verdad?
    -¿Simpático? -Alec la miró como si estuviera loca-. Los gatitos son simpáticos. Los brujos son… -Vaciló-. No -finalizó, sin convicción.  - Isabelle y Alec
  • -Mi cumpleaños era siempre el día en el que mi padre decía que podía hacer o tener cualquier cosa que quisiera.
    -¿Cualquiera? -Clary lanzó una carcajada-. ¿Y qué pedías?
    -Bueno, cuando tenía cinco años quise tomar un baño de espaguetis. [...]
    -¿Qué tal fue?
    -Resbaladizo.  -
    Jace y Clary
  • -La mayoría de los cazadores de sombras reciben sus primeras Marcas a los doce. Debías de llevarlo en la sangre.
    -Quizá. Aunque dudo que muchos cazadores de sombras reciban un tatuaje de Donatello de las Tortugas Nina Mutantes Adolescentes en el hombro izquierdo.  -
    Jace y Clary
  • Amar es destruir, y ser amado es ser destruido

TRAS SINSAJO - CAPÍTULO 12



Él mira hacía los lados, como procurando que nadie nos escucha; y esta nervioso, lo noto en sus ojos.
Antes de que pueda decirle algo el se me adelanta.
-Si, lo sé... -suspira hondo- se de lo que quieres hablar. Pero pensaba que todavía no te debería de habértelo dicho.
¡Mierda, mierda, mierda! Yo quería decírselo... Y otra pregunta mejor, ¿Peeta como sabía antes que yo que Gale a vuelto a casa? 
-Yo te lo quería contar -lo pongo la mano encima de la su mano y le acaricio- No tienes de que preocuparte...
-¿Como qué no tengo de que preocuparme? -me corta en mitad de la frase- Si, estoy preocupado, muy preocupado. Y sobre todo me preocupo por ti -para y respira antes de seguir hablando- y por los pequeños claro, por Prim y Gale... Y bueno, de Haymitch, de Johanna, de Annie... De todos. 
-¿De qué estas hablando?
-¿Cómo que de que estoy hablando? -Peeta frunza el ceño y me mira observa durante unos segundos sin hacer o decir nada- ¿Y tu? ¿De qué estas hablando?
-Yo de que Gale a vuelvo -le miro con mucha duda- Pero esta claro que tu no, si no no te preocuparías de -me paro un par de segundos para pensar en todos los nombres que ha dicho- De haymitch, y nuestros hijos... Y todos.
Mientras hablamos una chica peliroja y de pequeña estatura se nos acerca, es la dependienta, y deja encima de la mesa dos tazas de chocolate: junto ami deja el de chocolate blanco y junto a Peeta la taza que solo se puede ver nata. Le agradecemos con un "gracias" y ella nos devuelve una sonrisa, y se marcha otra vez al interior de la tienda.
-Mira Katniss, este no es el lugar más apropiado para hablar de eso -me susurra, pero luego sonríe.
Asiento con la cabeza y vuelvo a mi pequeño paraíso de chocolate caliente. 
Este chocolate es aun más dulce que el que probé hace años, y tiene más leche, claro. Me lo bebo en pequeños sorbos, en parte es por lo caliente que esta, pero esta tan rico que no quiero terminarlo.
Peeta me ofrece probar del suyo, pero si bebo un poco del suyo no creo que sea capaz de terminarme mi taza, así que le digo que no.
Cuando terminamos pagamos todo y salimos de la tienda en silencio.
-Katniss... Yo me tengo que ir a trabajar ahora, pero luego hablamos en casa. -mira hacía el suelo, probablemente por pura preocupación.- Pero quiero que sepas una cosa... Te quiero pase lo que pase ¿Si?
Yo asiento con la cabeza, y me lanzo a sus brazos.
-Sé que últimamente las cosas no nos van muy bien Katniss... -suspira rápido- Pero hay una razón por la que estoy tan nervioso.
-Da igual Peeta -le acaricio el pelo con suavidad- Luego hablamos ¿Vale? -sonrio para aliviarle un poco, y el también me sonríe de vuelta, aunque se nota que la sonrisa es forzada- No dejes al pobre John con todo el trabajo -voy a despedirme pero justo me acuerdo- Ah! ¿Me dejas tus llaves por favor? -río- Se supone que he venido hasta aquí por eso. 
El me das sus llaves y corre hasta la panadería para volver a trabajar.
Aunque para llegar a casa tenga que recorrer al rededor de un kilómetro cuesta arriba, el viaje se me ha hecho más que corto.
Me he pasado el viaje dándole vueltas y vueltas a la cabeza... Con todo lo que me ha dicho Peeta me he quedado preocupada, pero sé que ese no era el mejor momento para hacer preguntas.
Haymitch, pienso. A nombrado su nombre, y aunque se haga el loco Haymitch lo sabe todo.
Los últimos 200 metros los subo corriendo, la impaciencia me gana. 
Al llegar entro a nuestra casa y dejo toda la caza en la mesa de la cocina, y corro rápido a casa de Haymitch.
Llamo a la puerta impaciente, pero nadie responde, así que vuelvo a llamar, pero más de lo mismo; nadie responde.
Me doy la vuelta para volver a casa, pero me encuentro con Haymitch cara a cara.
-¿Me buscabas preciosa? -me pregunta, y hace una sonrisa irónica.- He tenido que bajar al pueblo, ya sabes. -y señala la bolsa llena de botellas que lleva en la mano.
-Si te buscaba -sonrío de lado- Quiero que me expliques algo
Entramos a su casa, que sigue igual de sucia como siempre.
-Siéntate -me señala unas pequeñas butacas que tiene, y me siento ahí.- Dime, que quieres que te explique.
Miro hacía el techo buscando la pregunta quiero hacerle, pero pensándolo bien, no sabía ni a por que había venido aquí.
-No lo sé -le miro durante unos segundos en silencio- Peeta tiene miedo, y no sé que es lo que teme. -suspiro profundo- Tiene miedo de que me pase algo, y a mis pequeños... Y de lo que te puede pasar a ti.
Haymitch se levanta, pero no me responde, y se va a la cocina. Al cabo de un minuto vuelve con una botella ya abierta y le da un sorbo.
-¿Quieres? -me ofrece acercándome la botella, pero le niego con la cabeza y me acerco más a el.
-No he venido a beber, he venido a por respuestas.
-Preciosa -hace una pequeña pausa- ¿Porqué deduces que yo sé porque Peeta esta preocupado?
-Haymitch, tu siempre estas a la corriente de todo...-subo la mirada y lo miro a los ojos.- ¿Me lo vas a explicar o estoy perdiendo el tiempo?
-Me temo que estas perdiendo el tiempo -sonríe de medio lado mientras me acompaña a la puerta- Adiós chica en llamas.- y termina la frase con un rápido guiño. 




sábado, 4 de enero de 2014

Tras sinsajo - Capítulo 11

-¿Catnip?
Hago un extraño movimiento y casi me caigo del árbol. Me agarro de una rama para sujetarme y no caerme, y el se ríe.
-Parece que has perdido un poco de practica.
-¿Te parece gracioso asustarme? -le digo de brazos cruzados fingiendo enfadarme, pero al final termino sonriendo.
-Si, la verdad es que a sido divertido verte hacer esos movimientos- me guiña el ojo y me sonríe el también- Ven aquí Katniss.
Mueve las manos hasta mi, y me abraza fuerte. Siento su musculado cuerpo apretando contra mi pequeño cuerpo, y me hace sentir pequeña. No es una mala sensación, pero se me hace un poco rara.
-No has cambiado nada -me dice cuando se separa de mi, y me mira de arriba a abajo. -Pero nada de nada. -me mira sonriente- Sigues igual de...
-¿Cuándo has llegado Gale? - Le corto. Prefiero no escuchar lo que quería decir después... El se toca la barbilla y pone cara de pensativo.
-Hace como... Unas cuatro horas, creo. Pero no podía dormir, así que decidí venir al bosque -al terminar la frase sonríe otra vez, pero esta vez con menos ganas.
La verdad es que el tampoco a cambiado nada, sigue igual de atractivo que siempre... ¿Katniss, que haces pensando en eso? Me pregunto ami misma. Acuérdate de Peeta.
-Se te desconocido ahora esto ¿No? -le digo algo borde, con un punto de enfado. Aunque he intentado no pensar en ello, creo que siempre he culpado a Gale por dejarme sola y olvidarme... Como amiga.
-¿Ibas a cazar? -me pregunta, ignorando lo que le he dicho, y al ver mi cara de desconcierto señala el arco que llevo en la espalda. Asiento con la cabeza. -Si quieres puedo ayudarte, ya sabes... Como en los viejos tiempos.
Cazamos durante un par de horas. Normalmente con solo dos horas apenas habría cazado nada, pero ahora con mi compañero de caza alado todo se hace mejor.
¿Cuándo se a vuelto Gale otra vez mi compañero de caza?
-Deberíamos volver -me despierta de mis pensamientos, y señala unas espesas nubes que se acercan- pronto tendremos la tormenta encima.
A la vuelta hacía el Distrito no hablamos nada, hasta que llegamos a la valla.
-¿Quieres que te acompañe a casa?
-No gracias -pienso en Peeta- No hace falta.- miro hacía el suelo y me viene una pregunta a la cabeza. -¿Has venido con toda tu familia?
-No, toda no... -esta vez se le nota en la cara un punto de tristeza.- Gina no va a venir, ya... Ya no estamos juntos.
Gina es su novia, bueno, era su novia. Es una atractiva mujer de piernas largas y cabello largo y dorado; con unos enormes ojos verdes. Para muchos la perfecta mujer.
-¿Y katniss? -al pronunciar mi nombre, o más bien el nombre de su hija, siento que las mejillas se me calientan.
-Si, Katniss a venido. Y esta deseando conocerte.
Siento como cada vez estoy más roja y no sé que responder.
-Luego podríamos llevar a nuestros pequeños a jugar... ¿Qué te parece?
-Si, claro, estaría bien.
Me imagino a la pequeña Prim, al pequeño Gale y Katniss jugando juntos entre las flores... Los tres pequeños inocentes jugando sin preocupaciones.
-Vale, luego nos pasaremos por tu casa Katniss.- se acerca y me da un cálido beso en la mejilla, y se acerca a mi oido y me susurra: Te he echado de menos.
Antes de que me diese tiempo a reaccionar el ya se había ido, así que me doy la vuelta y me dirijo a casa.
Al llegar meto la mano en el bolsillo de la cazadora, pero me doy cuenta de que se me ha olvidado coger las llaves, así que llamo a la puerta, pero dudo que haya nadie... Peeta estará en la panadería y los peques en el colegio.
Tendré que ir a la panadería.
Bajo las calles que me llevan hasta el centro de nuestro Distrito.
Al abrir la puerta de la panadería Peeta me mira desde el mostrador y al verme me sonríe pero sigue atendiendo a la bajita mujer que le esta comprando.
Cuando ella sale de la panadería, Peeta sale del mostrador y se acerca hacía mi y sin decirme nada me da un húmedo beso en los labios.
-¿A qué se debe el honor de que la chica más hermosa del Distrito venga aquí?
Le sonrío.
-Le verdad es que se me han olvidado las llaves, pero bueno, aprovechando la ocasión podríamos pasar un poco de rato juntos. -y le devuelvo otro beso, este un poco más corto.
-Me parece genial, espera un poco. -entra de nuevo y le dice a su John, su ayudante, que se encargue de la panadería mientras el viene conmigo.
Al salir me pasa el brazo por encima del hombro.
-¿Qué podemos hacer ahora mi panadero? -el me responde con una sonrisa de oreja a oreja mientras piensa.
-Tengo una idea, ven.
Caminamos juntos por las calles del Distrito hasta llegar a un pequeño local que nunca antes había visto, el sitio se llama "Chocolate Factory".
-Lo abrieron ayer, pensé que te gustaría.- por dentro hay miles de chocolates diferentes, chocolates que nunca imaginé que podrían existir, es un pequeño paraíso lleno de lujos.
Me fijo bien en todo y aunque yo solo conocía un tipo de chocolate (y pensaba que era el único que había) aquí se pueden encontrar decenas de tipos.
-Es una idea genial, gracias cariño. -y le doy un beso en la mejilla.- Yo quiero este, el blanco. Tiene buena pinta.
-Yo entonces cogeré este -y señala uno que alado pone "chocolate con leche y avellanas".
Nos sentamos en unas cómodas sillas que hay en el mismo local.
- Oye Peeta...- suspiro hondo- Tenemos que hablar sobre algo...



Refugio - Ann Aguirre

Titulo original: Outpost

Serie: Razorland #2

Autora: Ann Aguirre

Número de páginas: 434

Editorial: Hidra

Año: 2013


Sinopsis: El mundo de Dos ha cambiado desde que los lectores lo conocieron en Enclave. Ahora vive en la Superficie, en un pueblo llamado Salvación. Pero los problemas no la han abandonado. En los túneles al menos la trataban como a una adulta y podía contribuir a mantener el enclave. Pero en Salvación la ven como una pobre muchacha que aún necesita aprender mucho. Encima no encaja con las demás chicas: no le gusta cocinar, coser ni ir a clase. Dos solo sabe luchar.

Para empeorar aún las cosas, su compañero de Cacería, Van, no se acerca a ella. Sus sentimientos por Van no han cambiado, pero él prefiere mantenerla a distancia. Confusa y sola, Dos empieza a buscar una salida. 

Tratará de alistarse en las patrullas de verano que protegen a los sembradores del campo de los ataques de los Engendros. Pero todo está cambiando en la Superficia de un modo similar a como lo hizo bajo tierra. Los Engendros se han vuelto aún más listos. Observan. Esperan. Planean. Esos monstruos no tienen intención de permitir que Salvación sobreviva, y parece que Dos es la única consciente del fatídico destino que les aguarda tras las murallas.

Opinión: Cuando me enteré que había segundo libro no dude en comprarlo, aunque tenía mis dudas si me gustaría tanto como el anterior, ya que Ann Aguirre había dejado el listón muy alto.
Al igual que en Enclave, primer libro de la trilogía, le cuesta mucho empezar, y al principio digamos que no hay muchas acciones, pero tampoco podemos decir que se me a hecho pesado leerlo.
En cuanto a los personajes, algo que me ha gustado muchísimo es como Ann expresa los sentimientos de Dos, la protagonista. En este segundo libro conocemos mejor como piensa y cuales son sus sentimientos, cosa que esta realmente bien expresado. Pero en algunos momentos sus acciones y pensamientos no encajan bien del todo en el personaje; sabemos que Dos tiene dos ellas, pero son tan diferentes que suena muy creíble.
También tenemos a Van, otro de los protagonistas. En este segundo libro todavía no le conocemos del todo bien, cosa que no me agrada mucho porque tengo mucha curiosidad de como es realmente, y espero que en el tercero lo podamos descubrir.
Luego esta Stalker, y tengo que reconocer que nuestra escritora ha hecho muy buen trabajo con el. Consigue que tenga una personalidad a la vez común y peculiar. Todo lo que hace, lo que piensa, como lo expresa... Esta realmente genial, y cada vez me gusta más este personaje.
Luego hay otros personajes, como mamá robles y Edmund (padres adoptivos de Dos), y Improbable; que son puro amor. En este libro los personajes secundarios tienen mucha importancia, mucha más que la que tienen en el primero, cosa que se agradece mucho.
En cuanto a lo negativo como peor cosa pondría el amor entre Van y Dos. 
Yo creo que al final del primer libro todos nos suponíamos que seguían queriéndose y al principio apenas se hablan pero luego su amor es muy fingido, no suena a amor verdadero. Es un amor demasiado empalagoso, y aparte de que ami eso no me guste demasiado, a estos dos personajes no les encaja ese tipo de amor, y no suena a real.
Y para terminar tenemos el final del libro; que nos deja con mucha intriga y muchas preguntas sin respuesta, y por eso espero tanto el tercer libro.

Resumiendo todo, yo creo que es un libro que merece la pena leer. Se lee con mucha facilidad y rápido, y realmente es entretenido.
Yo lo recomiendo, por todo lo que he puesto anteriormente. 
Además el tercer libro promete mucho y he leído muy buenas opiniones sobre Horda, y para leer el tercero este es indispensable.
Si os animáis a leerlo espero que os guste.